8º Aniversario del 11 de Septiembre de 2001

Hoy se está recordando la fecha del 11 de septiembre de 2001, cuando tiraron las Torres Gemelas del WTC los aviones secuestrados y los ataques terroristas sobrecogieron el mundo.
Pero me hago una reflexión, en estos 8 años ¿Cuánto ha cambiado el mundo?... Estamos más seguros?? Más protegidos??...
O solo estamos más vigilados y controlados el resto de ciudadanos del mundo de buena voluntad??
Hay nuevos reglamentos, normas, leyes, etc… pero estamos de verdad más seguros??? ...
Si estar más seguros es sembrar el terror en casa del vecino, si es atrincherarnos en nuestra casa con todo tipo de armas y autodefensas, pues seguro que lo estaremos. Pero de verdad todavía no tengo claro y no se para que sirve…
Creo que la solución no es ni ir a bombardear al otro lado del mundo, ni tampoco es registrarnos en los aviones y hacernos casi desnudar en los controles de seguridad antes de embarcar, quitarnos el cinturón, los zapatos, meternos en el scanner y pasarnos el detector de metales en la boca por si el puente o el marcapasos es una bomba e instaurar la psicosis en los aeropuertos, tratando a la gente como ganado, por parte de uniformados maleducados.
La seguridad no deja de ser una sensación, un estado de ánimo y sobre todo una forma de ser y actuar. Prevenir, adelantarse a los amigos de lo ajero y estar preparado para cualquier contingencia, pero creo que con tranquilidad, naturalidad, serenidad y con inteligencia.
Es más hago una pregunta, cuanto se ha invertido en rearmarse, blindarse y cuanto se ha invertido en que los ciudadanos sepamos reaccionar en una situación puntual de crisis, tener cursos de primeros auxilios y poder atender a las víctimas, cuantos ciudadanos conocen el protocolo de cómo reaccionar y que hacer en caso de un terremoto, de un incendio, como actuar ante una catástrofe meteorológica, un accidente de coche... en cuanto se declara la alerta, la histeria se desata. Eso sí a todos nos obligan a saber que no podemos llevar envases de líquidos mayores de 100 cc. En los aviones, por lo tanto no podemos llevar ni agua, ni un jugo, no sea que explote y se despresurice la cabina.
Cuanto nos queda a todos todavía por aprender, y que pena de sociedad tenemos, pero ya se ve que los lobbies del armamento y los señores de la guerra pueden más que los de la educación, la formación y el conocimiento.
Más que un aniversario para recordar la memoria de las víctimas, también deberíamos celebrar el fracaso de nuestra segura sociedad.